Retiros de Emaús, Premio ReL: «Son un revulsivo maravilloso» y se ve la «resurrección de la gente»
Los retiros de Emaús son una de las realidades de nueva evangelización que mejor está funcionando en estos momentos en España e Iberoamérica. Son miles de personas las que han pasado por esta experiencia de fin de semana y han visto transformadas sus vidas tras un profundo encuentro con Dios. Conversiones impresionantes, avivamientos de la fe, matrimonios reconstruidos, reconciliaciones entre familiares, y un largo etcétera, son los frutos de una realidad que sigue expandiéndose por las parroquias.
Precisamente, por estos frutos evidentes los Retiros de Emaús han sido reconocido con el Premio Religión en Libertad en la categoría "Nueva Evangelización" en la segunda edición de unos galardones que se entregarán el próximo 16 de octubre en Madrid.
El acto se desarrollará en el Auditorio de la Facultad de Económicas de la Universidad San Pablo CEU de Madrid (Calle Julián Romea, 23) a las 19.30. Con estos premios se pretende homenajear a personalidades e iniciativas comprometidas en la nueva evangelización, la creación de una cultura católica y la defensa de la fe, la vida, la familia y la educación cristiana.
El primer sacerdote que les abrió la puerta en España
Entre los que recogerán este reconocimiento a los Retiros de Emaús estará el sacerdote Enrique González Torres, primer párroco que hace algo menos de 10 años abrió las puertas a esta herramienta de nueva evangelización en una parroquia española.
El entonces párroco de San Germán en Madrid, ahora en la parroquia de Nuestra Señora del Buen Suceso, cuenta a Religión en Libertad cómo fue el inicio de los Retiros de Emaús y por qué decidió arriesgarse a abrir la parroquia a una realidad entonces desconocida en España.
El padre Enrique González relata que “unas personas que venían a hacer Adoración por las mañanas y que eran de mi total confianza me propusieron esta experiencia porque ellas lo habían vivido en Colombia y habían visto los frutos de conversión y vida cristiana que había tenido”.
"Vi con claridad absoluta que me tenía que fiar"
Estas personas –recuerda el párroco- estaban convencidas de que Emaús sería “una revolución en España”. “Como eran personas de fe y me constaba que eran de fiar, pues yo me fie. Soy bastante poco amigo de los experimentos, pero vi con una claridad absoluta que me tenía que fiar. A veces este es el mayor empujón, una certeza interior que no puedes explicar”.
Una vez que dijo sí él mismo quiso ver en qué consistía. Enrique González señala que le sorprendió el propio retiro en sí por la “acción del Espíritu Santo totalmente desbordante y sobre todo por la renovación y la resurrección de la gente que iba y participaba. Para mí fue una absoluta sorpresa”.
A su juicio la clave del éxito de los Retiros de Emaús es que en realidad “se suscita el testimonio como en los primeros cristianos. Un lunes por la mañana tu compañero de trabajo bien completamente transformado con una alegría radiante, y a veces explícitamente dice que su vida ha cambiado. Esto despierta un interrogante, una sorpresa: ‘¿qué le ha pasado a éste que ha cambiado de la noche a la mañana? Yo quiero que esto me pase a mí’”.
Una respuesta para las parroquias que se mueren
Yendo a su experiencia como párroco, el padre González destaca que Emaús es una respuesta concreta a una situación de crisis, y es que “nuestras parroquias están muertas o languidecentes, y hay una pastoral de conservación que es como estar tocando el violón en el Titanic mientras se hunde”.
La realidad es que muchos párrocos se “desesperan” buscando formas para revitalizar sus parroquias. Y para el ahora párroco de Nuestra Señora del Buen Suceso de Madrid “Emaús es un instrumento de nueva evangelización en la parroquia y para la parroquia que puede ayudar infinitamente a reactivar la vida cristiana. Y eso es de lo que puedo dar testimonio”.
Según su experiencia, después de los retiros de Emaús “hay multitud de personas que quieren trabajar y dar su tiempo y su vida a la Iglesia. Surgen mil voluntariados de Cáritas, mil ideas de nueva evangelización, se fomenta la Adoración y salen mil iniciativas. Creo que este es el éxito, y es que ha sido algo que ha ido de la mano de los laicos, grandes protagonistas y agentes en todo esto, y los párrocos se han fiado y han apostado por ello”.
Un "revulsivo maravilloso"
Por ello, el padre González afirma convencido que “Emaús ha sido y está siendo para las diócesis de España un revulsivo maravilloso”.
A los que dudan sobre si asistir o no a uno de estos retiros, este sacerdote madrileño afirma que les diría: “¿Cuántas veces has sentido envidia de los apóstoles que comieron con Jesús y hablaron con Él de tú a tú? Eso hoy puedes vivirlo”.
Por otro lado, Enrique González incide también en otro aspecto y es que ocasiones “uno está pendiente de todos con muy buena intención, pero no se da cuenta de que se desfonda y vacía si no cuida de sí. Y dedicarse un fin de semana a ellos mismos no es en absoluto egoísmo, sino que es la mejor manera de seguir amando a los suyos y seguir con una vida entregada”.
También habló del hecho de que no se conozca apenas nada de lo que ocurre en los retiros. “Nosotros llamamos a esto confidencialidad. Tiene dos motivos que lo justifiquen. Al tratarse del testimonio como uno de los grandes ingredientes principales hay que tener un respeto sagrado por las personas que abren su corazón y nos cuentan lo que Dios ha hecho en su vida. No se puede airear nada de lo que ahí se dice y se hace. En segundo lugar, hoy en las películas hablamos de ‘spoiler’. Si te cuentan el final te han hecho polvo la experiencia. Hay que dejarse sorprender y facilitar al Espíritu Santo esa obra que se hace”.
